Normalmente no ponemos las bebidas en la dieta semanal. Solemos dar por hecho que el agua debe ser la bebida fundamental. Aunque es cierto que podemos introducir otro tipo de bebidas como zumos naturales, batidos, sopas, gelatinas o infusiones. Hoy veremos algunos ejemplos para hacer una hidratación completa y variada en la dieta.
Una correcta hidratación en nuestra dieta semanal
Normalmente se suele decir que hay que beber 2 litros de agua en la dieta. Esto no tiene que ser algo estricto, ya que la hidratación no solo depende de las bebidas, también influyen factores como los alimentos que consumimos en la dieta, la edad, altura y actividad física que hagamos.
El factor que más influye, sin duda, es la actividad física. Si hacemos algún deporte de larga distancia o entrenamientos intensos, la cantidad de agua que necesita nuestro cuerpo lógicamente se hace mayor. Es difícil cuantificar cuánta agua necesitamos a diario, pero el organismo se encargará de ello haciendo que sintamos más o menos sed.
En esta dieta semanal vamos a apostar por diferentes tipos de bebidas: agua (sobre todo), zumo de naranja y granada (que ahora es la época), sopas y batidos de frutas. En cuanto al agua, no apuntamos qué cantidad en cada comida, al igual que no ponemos la que se bebe entre horas.
En la pirámide nutricional nos aconsejan tomar de 6 a 8 vasos de agua diarios, algo que se incrementa en 1-2 vasos cada 30-40 minutos de actividad física que hacemos. Digamos que lo importante es beber a lo largo del día (no solo en las comidas) y sobre todo agua o bebidas poco azucaradas.
Ver 1 comentarios