Las nueces son uno de los frutos secos más consumidos en el mundo, pero cometemos dos errores en su consumo: no ingerimos la cantidad suficiente cada día y no las almacenamos de forma correcta. Vamos a ver en este artículo cuál es la cantidad de nueces que consumir cada día para aprovecharnos de sus beneficios, y la manera sorprendente en la que deben guardarse. Un adelanto: la despensa o un bote en la cocina no es el mejor lugar.
¿Por qué tienes las nueces en el congelador?
Los expertos recomiendan un umbral de 30 gramos de nueces (o frutos secos) al día. Tomar cantidades superiores de unos 30 gramos de nueces al día se asocian con menor riesgo de enfermedades de todo tipo y de mortalidad por todas las causas.
Sin embargo, el consumo medio por persona a nivel mundial se estima entre 3 - 6 gramos de nueces al día, no superando en la mayoría de las personas los 10 g/día.
Si estás entre esas personas que no llegan al umbral citado en el párrafo anterior, te estas perdiendo todos los beneficios que detallamos en este artículo: mejor composición corporal, menos colesterol malo, un metabolismo más eficiente, una inflamación menor, o lo que es lo mismo, unas células más jóvenes, y aún más beneficios.
Si estás dentro del grupo que sí consume nueces a diario, y las tiene guardadas en un mueble de la cocina, estás cayendo en otro error que comete casi la totalidad de la población.
¿Cuál es la mejor manera de almacenar las nueces?
Aunque te suene muy raro, y no conozcas a nadie que lo haga, las nueces deben almacenarse en la nevera o incluso en el congelador. Lo normal es tener un tarro o una bolsa de frutos secos en alguna parte de la cocina, pero no en la nevera y menos aún en el congelador.
Lo ideal es evitar que estos alimentos "vivos" no estén en contacto con luz solar, calor u oxígeno, ya que sus grasas saludables se deterioran, y el sabor se hace más amargo y menos sabroso. Todo dependerá del tiempo que tengamos los frutos secos almacenados, ya que si compramos una bolsa pequeña de nueces y nos la comemos en unos días no es tan importante este detalle.
Si la cantidad de frutos secos necesita unos dos o tres meses para comérnosla, lo primero es utilizar un recipiente hermético, como un frasco de vidrio, y guardarlo en una zona donde no reciba luz solar ni tenga excesiva calor en fechas de temperaturas elevadas.
Si queremos asegurarnos de ello, y que esos frutos secos aguanten su sabor intacto durante más tiempo, guarda las nueces en dicho recipiente hermético en el frigorífico, lejos de otros alimentos como cebollas con olor fuerte para evitar que los absorban. En nuestra opinión, esta es la mejor opción, ya que te aseguras de mantener el sabor, pero no tienes el ajetreo de utilizar el congelador.
Para tener la máxima conservación, en lugar de la nevera, guarda las nueces en el congelador con la fecha en que las has guardado. Cuando las vayas a tomar solamente deberás sacarlas un poco antes, esperar a que alcancen la temperatura ambiente y abrir el recipiente para consumirlas.
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