Seguro que en más de una ocasión hemos escuchado hablar de una afección que a muchos nos da pánico, se trata del herpes. En la mayoría de los casos no sabemos a ciencia cierta lo que es el herpes ni a qué niveles nos afecta. Para ello antes de nada diremos que el herpes es una infección causada por un conjunto de virus que producen la aparición de úlceras que causan picor, dolor y que pueden aparecer en diferentes zonas del cuerpo. Por ello es necesario que sepamos como atajarlas y aliviar sus efectos.
Antes de nada, debemos saber que si aparecen este tipo de afecciones debemos acudir al médico, ya que con un tratamiento adecuado se eliminarán las molestias que causan, aunque es una enfermedad que no se cura y que permanece latente para aparecer cuando estemos bajos de defensas. No debemos olvidar que el herpes se contagia con mucha facilidad, pues simplemente con el contacto lo podemos contraer.
El herpes es una afección dolorosa y molesta para los que la padecen, por ello es necesario que echemos mano de remedios encaminados a evitar ese malestar, y desde Vitónica queremos destacar algunos de ellos. Normalmente lo que sentimos cuando un herpes está en plena ebullición es ardor y quemazón. Para evitarlo no es recomendable que recurramos a rascarnos u otras soluciones, sino que lo ideal y menos agresivo es la colocación de paños húmedos sobre la parte afectada para acabar con esa sensación de calor y relajar la zona haciendo que nos deje de producir picor.
Bañarnos en una bañera con agua templada es otra solución para acabar con las molestias del herpes. Para ello nos debemos sumergir por completo en la bañera y permanecer un rato en ella, de modo que se acabe con el ardor y escozor que nos causan las ampollas y pústulas. Además de esto es importante que mantengamos la zona afectada seca y limpia, para evitar que la infección vaya a más. Junto a esto debemos utilizar prendas que no rocen ni empeoren las heridas, como por ejemplo ropa interior de algodón, que es mucho más suave y adecuada para las personas que padecen herpes. Una cosa a tener en cuenta es que la ropa debe quedar suelta para evitar el roce y empeorar el estado de las heridas.
Es importante que prestemos especial atención a la evolución de las heridas, ya que existen casos en los que las úlceras son tan grandes que llegan a sangrar. Por ello es necesario que siempre nos pongamos en manos de un especialista, pues será la persona más adecuada para tratar esta afección.
Imagen | Sim Dawdler
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