El CrossFit es un método de entrenamiento que se puede adaptar fácilmente a cualquier persona, ofreciendo diferentes efectos en nuestro organismo que pueden optimizar la salud. Respecto a esto, te contamos lo que dice la ciencia acerca del CrossFit y su impacto en nuestro metabolismo.
Nuestro metabolismo y su actividad
El metabolismo es el conjunto de procesos químicos que tienen lugar en nuestro organismo y que nos permiten mantenernos con vida. Es decir, involucra todas aquellas actividades que en nuestro cuerpo se llevan a cabo para obtener calorías, nutrientes y demás de lo que comemos así como también, todo aquello que nos permite movernos, desarrollarnos y reproducirnos.
Por todo esto, solemos referirnos al metabolismo o a la tasa metabólica para designar el gasto total de calorías que insumen dichos procesos químicos en nuestro cuerpo.
Por esta razón, a una mayor tasa metabólica o con un metabolismo más activo quemaremos más calorías a diario, y esto puede traducirse en un adecuado control del peso corporal así como en una mejor composición de nuestro organismo.
Es importante tener en cuenta que sobre el metabolismo influye considerablemente la edad del individuo así como la composición corporal y el nivel de actividad física. Es decir, es que a menos edad de una persona, a mayor cantidad de masa muscular y a mayor nivel de actividad física superior es el gasto metabólico y la actividad de nuestro metabolismo.
Lo que el CrossFit puede lograr a nivel metabólico
El CrossFit es un método de entrenamiento cuya intensidad suele ser elevada, pero igualmente puede adaptarse a todo tipo de personas y niveles de entrenamiento. Como todo esfuerzo físico se traduce en mejoras a nivel metabólico.
Es decir, cualquier actividad física que podamos hacer representa cambios positivos en nuestro metabolismo incrementando las calorías quemadas cada día y traduciéndose por lo general, en una mejor composición corporal que ayuda a elevar la actividad metabólica.
Al respecto, hay estudios que comprueban que la práctica de CrossFit puede producir cambios considerables en la composición corporal así como también en el perfil de lípidos de las personas y en otros parámetros de nuestro organismo que nos hablan de mejor salud y de mayor eficiencia metabólica.
Una revisión de diferentes estudios señala que a mayor volumen e intensidad del entrenamiento mayores son los efectos del CrossFit sobre nuestro metabolismo elevando los niveles de ácido láctico así como de hormonas que estimulan la ganancia de masa magra como hormona de crecimiento y testosterona.
Por otro lado, las investigaciones confirman que quienes practican CrossFit con regularidad (y más a un nivel avanzado) poseen una mejor composición corporal, es decir, un porcentaje de grasa más reducido y una mayor proporción de masa magra tanto muscular como ósea, y esto se traduciría sin duda en un gasto energético superior debido a un metabolismo más activo.
Como si fuera poco, un estudio que evalúo el entrenamiento de seis meses de CrossFit sobre la eficiencia metabólica comprobó que verdaderamente la oxidación de grasas se maximiza en detrimento de la oxidación de carbohidratos con la práctica de esta actividad de forma regular y a largo plazo.
Todo esto nos lleva a pensar que el CrossFit es una actividad realmente efectiva para optimizar nuestro metabolismo y producir mejoras beneficiosas tanto en la tasa metabólica basal como en diferentes procesos químicos que pueden favorecer la salud y alejarnos de diversas enfermedades.
En Vitónica | Mi experiencia después de dos meses haciendo CrossFit
Imagen | Jumpstory
