Después de un entrenamiento intenso, es de lo más normal que acabemos literalmente... reventados. Una sensación de cansancio, pero al mismo tiempo un agotamiento con sabor dulce...El problema es que en muchas ocasiones, entre que no tenemos mucho tiempo y que ya hemos "cumplido", nos olvidamos del último paso y nos vamos directos a la ducha.
Cuando hablo del último paso, me refiero como todos supondréis, al momento de estirar. Muchos lo haréis cada día y otros solo de vez en cuando. Pero, ¿es realmente importante estirar después de entrenar?
Lo cierto es que existen muchas personas que simplemente se olvidan de este último paso por pereza y otras que, además de olvidarse, piensan que es una pérdida de tiempo y que el estirar realmente sirve de poco o de nada.
Un ligero estiramiento después del entrenamiento, que apenas nos va a llevar unos minutos, no sólo es beneficioso para liberar la tensión muscular acumulada tras el esfuerzo, sino que además va a ayudar a mejorar nuestra movilidad y a favorecer una regeneración más rápida del músculo.
Un ligero y lento estiramiento de los grupos musculares tras el entrenamiento, sí es realmente adecuado. Si eres algo perezoso para realizar el último paso de tu entreno, recuerda que tus músculos te lo agradecerán!
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