Uno de los males más comunes que aquejan a los corredores es el de la sobrecarga en el tríceps sural o gemelos, los músculos que dan movimiento a la articulación que nos conecta con el suelo.
Las causas pueden ser variadas y unas de más fácil solución que otras por lo que en este artículo te explicamos las más comunes.
Mala o inexistente planificación del entrenamiento
Es muy común que cuando una persona desea comenzar a hacer deporte se ponga ropa deportiva y cualquier par de zapatillas y se eche a correr a la calle. La iniciativa y la buena disposición están genial pero no podemos o al menos no deberíamos entrenar sin un plan y conocimiento previo de la técnica de carrera puesto que el running es mucho más que andar rápido.
Así pues un buen plan de entrenamiento debería ser personalizado y adaptado a las características de cada corredor, además de periodizar correctamente en el tiempo variables como volumen, intensidad o frecuencia de entrenamiento.
Si deseas tomártelo en serio y mejorar marcas a corto, medio y largo plazo, contrata a un profesional cualificado, especializado y experimentado que planifique el entrenamiento para ti. Si tu objetivo es más modesto asegúrate de correr bien y adapta con sentido común algún plan pre-diseñado para principiantes.
Adaptación al volumen de entrenamiento o kilometraje
Este punto va muy relacionado con el anterior, puesto que a la hora de planificar sesiones de entrenamiento debemos tener en cuanta a corto y largo plazo la distancia objetivo que queremos cubrir y el tiempo en el que queremos hacerlo. No podemos acumular kilómetros entrenamiento tras entrenamiento y confiar en que todo irá bien y nuestro cuerpo lo soportará.
Cuando tenemos una molestia del estilo a la que estamos tratando en este artículo, el problema rara vez proviene de la sesión anterior sino de la acumulación de fatiga de días e incluso semanas anteriores.
Por último debemos tener en cuenta nuestra adaptación al entrenamiento. Si salimos a correr de forma más frecuente y mientras la planificación del entrenamiento sea adecuada, probablemente nos adaptaremos mejor al entrenamiento que una persona que sale a correr menos o que incluso es irregular. Esto último es muy típico: personas que no siempre disponen del tiempo que quisieran para entrenar y cuando por fin disponen de él lo celebran con un festín de kilómetros. Es en estas situaciones cuando se gestan los problemas.
Zapatillas inadecuadas
Este punto lo comentamos después de los anteriores precisamente porque estos son más determinantes. No pretendemos hacer apología de que un buen calzado carezca de utilidad pero no siempre el más caro es el mejor ni el más barato el peor. En lo que debemos fijarnos principalmente a la hora de elegir un tipo de zapatillas u otras es en cuáles se adaptan a nuestro pie y técnica de carrera, no al revés.
Un podólogo puede ayudarnos a tomar esta decisión.
Masajes y foam rolling
Una buena estrategia para prevenir sobrecargas en los gemelos es usar brevemente un foam roller antes y después de los entrenamientos. Si hiciera falta también puede utilizarse en casa en los días que no entrenemos u otra vez horas después del entrenamiento.
Por supuesto tampoco debemos desestimar la opción de ir al fisioterapeuta, el profesional que mejor puede tratarnos en este casos, tanto a nivel preventivo como tomando partido en el tratamiento.
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