Otro capítulo más de la serie "Runners por el mundo", y en esta entrega nos acercamos hasta la ciudad de Doha, capital del estado de Qatar, uno de los emiratos de Oriente Medio situado en el golfo Pérsico.
Mi amigo Raúl ha estado trabajando los últimos tres meses en la ciudad de Doha, y ha querido compartir con todos nosotros la experiencia de salir a correr en un país con una cultura totalmente diferente.
Calor agobiante, y ni rastro de runners
Raúl es aficionado a salir a correr y participa en muchas carreras populares en Madrid: la experiencia del running en Doha, según me ha contado, ha sido totalmente diferente a la que está acostumbrado aquí, más aún cuando se encontraba en una zona en la que no había muchos occidentales.
En Doha no existe cultura del running: los nativos de Doha no salen a hacer deporte al aire libre, en parte por las altas temperaturas que se soportan durante el día (más de 40 grados). Si a esto le sumamos las tormentas de arena y el aire caliente del siroco, entenderemos por qué prefieren el deporte indoor. "Para salir a correr tienes que ir al anochecer, cuando ha bajado un poco el calor; si no es imposible", me cuenta Raúl.
Al igual que comentaba Celeste sobre su experiencia en Kuwait, también en Doha las calles son impracticables para salir a correr: hay que buscar lugares específicos para ello, como el paseo central de la ciudad o el paseo marítimo. De cara a celebrar la Copa del Mundo de Fútbol en 2022 se están comenzando a construir grandes instalaciones deportivas, y alrededor de algunos de estos campos de fútbol hay pistas de atletismo por las que podemos correr unos kilómetros.
La experiencia del deporte en Doha
Las diferencias culturales entre Qatar y España son abismales: quizás lo que más llama la atención es la escasa libertad que se da a las mujeres de puertas hacia fuera. Las mujeres de Doha tienen sus propios gimnasios, generalmente ubicados en grandes complejos deportivos o en alguno de los inmensos centros comerciales con los que cuenta la ciudad. Aparte, también hay gimnasios más orientados al público occidental, donde se mezclan hombres y mujeres.
Otra cosa que a Raúl le sorprendió es la gran variedad de complementos alimenticios y bebidas energéticas que se ofrece en los supermercados de Doha: muchísimos zumos, bebidas con vitaminas, batidos proteicos... Una amplia oferta para mantenerse hidratado y complementar la dieta.
Doha es una ciudad donde la cultura del running está aún por llegar: aunque las condiciones climatológicas no sean las mejores, siempre quedará la cinta para sumar unos kilómetros.
Muchas gracias por compartir tu experiencia con nosotros, Raúl: ¡aprovecha la vuelta a Madrid para correr al aire libre!
Imagen | Jikatu En Vitónica | Runners por el mundo: Kuwait En Vitónica | Runners por el mundo: Brisbane (Australia)
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