Sobre la calvicie se habla mucho y muchas son las especulaciones y los remedios que seguimos para evitar que se nos sica cayendo el pelo. Normalmente se habla muco sobre este trastorno, pero ¿realmente es cierto todo lo que se dice sobre él?. Alrededor de la calvicie existen infinidad de mitos que no tienen nada de verdad y que muchos están fundados en creencias populares, por ello queremos desmentir algunos.
En primer lugar siempre se suele decir que la calvicie es algo que afecta a los hombres y no a las mujeres. Esto es totalmente falso, ya que se trata de un problema hormonal, que si bien es cierto que afecta a un mayor número de hombres, también son muchas mujeres las que pierden su pelo poco a poco y no lo recuperan. Junto a esto suele primar la idea de que si el padre es calvo los hijos lo serán. Esto es totalmente falso, pues los genes de la madre también están presentes y pueden primar por encima de los del padre, con lo que la pérdida de pelo no tiene por qué producirse.
Normalmente se asocia la pérdida del cabello con el aumento de la testosterona, por lo que el sexo se pensaba que era una forma de perder el cabello. Es algo falso, pues no hay pruebas que demuestren que sea la causante de la calvicie. Algo que normalmente solemos achacar a la caída del pelo es el uso de productos fijadores y secadores. El primer caso no tiene por qué influir en la caída, ya que los productos están preparados especialmente para el pelo y por lo tanto lo respetará. El uso excesivo del secador sí que puede hacernos perder más pelo, aunque es algo temporal, pues vuelve a crecer.
Una afirmación que se suele hacer es que llevar gorra hace que se caiga más pelo. Algo que no es cierto, ya que el oxígeno llega a los folículos a través de la sangre, por lo que la gorra no interviene en este proceso. Eso sí, con su uso podemos arrancar más pelo, pero se regenera. La alimentación también interviene en el crecimiento del cabello, esto es totalmente cierto, y por ello es importante que ingiramos alimentos que nos ayuden a hacer que éste crezca más fuerte y sano, como aquellos que contengan vitamina B. Lo mismo sucede con el estrés, y es que un exceso acelera la caída del cabello.
Mucha gente piensa que raparse la cabeza hace que el cabello nos crezca más rápido y mejor. Esto es algo totalmente falso ya que solo sirve para sanearlo y evitar descamaciones y deshidrataciones que suelen producirse cuando lo tenemos muy largo y poco cuidado. Pero la fortaleza está determinada desde el interior. Por ello un riesgo de calvicie es utilizar anabolizantes, pues pueden acelerar la pérdida del cabello al estimular la producción por parte del organismo de la hormona DHT, culpable de la pérdida del cabello.
Es importante que no nos dejemos llevar por estos mitos y seamos capaces de diferenciar entre la realidad y la ficción, y nos concienciemos de que es necesaria una correcta alimentación para mantener un cabello sano, al igual que la estimulación del cuero cabelludo a través de masajes que nos ayudarán a mejorar la circulación y el aporte de nutrientes y oxígeno a los folículos capilares.
Vía | Menshealth Imagen | doortoriver
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