Ya hemos dicho que los brazos son de gran ayuda al momento de correr, por eso, optimizar su movimiento es fundamental para mejorar nuestro desempeño deportivo. Un truco para un buen braceo es que al correr, lleves tus codos hacia atrás.
Los codos no deben adelantarse al cuerpo cada vez que movilizamos los brazos por los lados del tronco, pues el braceo es hacia atrás, por lo tanto, sólo deben llegar a la línea media del cuerpo y no anteponerse a éste, ya que un mal movimiento de los brazos puede afectar el movimiento de las piernas.
Para que el braceo sea correcto, al correr, debemos llevar los codos hacia atrás y no deben quedar adelante del cuerpo, pues en este caso las piernas se extenderán en exceso y la pisada tendrá un mayor impacto, lo que implica un desperdicio de energía.
Entonces, los puños no deben pasar la altura del mentón y el codo no debe adelantarse al cuerpo, sino que debemos llevarlos hacia atrás para obtener un braceo eficiente y seguro al correr.
Imagen | Familymwr
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