El truco infalible para saber si un huevo realmente está cocido por dentro

El secreto es descubrir cómo se distribuye el peso en el interior del alimento

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El huevo es uno de los alimentos más saludables y versátiles que podemos incluir en nuestra dieta diaria, siendo una excelente fuente de proteína de calidad y micronutrientes valiosos. Te contamos un truco infalible para distinguir un huevo cocido de un huevo crudo.

Las propiedades del huevo cocido

Como hemos dicho el huevo es destacable por la presencia de proteínas de calidad que se acompañan de grasas que nuestro organismo puede aprovechar al máximo, y que a diferencia de lo que muchos creen, no  perjudica la salud cardiovascular ni eleva los niveles de colesterol en sangre.

Por otro lado, en el huevo encontramos vitaminas del grupo B, hierro, potasio, vitamina A y vitamina D especialmente ubicados en la yema o porción grasa del mismo.

Para aprovechar al máximo sus nutrientes y disminuir la presencia de sustancias con efecto antinutriente resulta fundamental consumir el  huevo cocido siendo esto también de ayuda para reducir el riesgo de sufrir enfermedades transmitidas por alimentos como por ejemplo, una salmonelosis.

De esta forma, siempre será recomendable consumir un huevo cocido o previamente pasteurizado, para aprovechar al máximo los nutrientes del huevo  garantizando la inocuidad ante su consumo.

Girar el huevo: el truco que no falla

Si abres la nevera, recuerdas que haz cocido diferentes huevos y no puedes  distinguirlos de aquellos crudo, te damos un truco infalible para reconocerlos: hacer girar los huevos.

Colocar el huevo sobre la encimera y hacerlos girar nos permitirá saber con  facilidad si estamos ante un huevo crudo o un huevo ya cocido, pues si el huevo al girar se tambalea se trata de un huevo crudo, mientras que si gira con total facilidad y de manera homogénea el huevo ya está cocido.

Esto es así debido a que en el huevo duro o ya cocido el peso se distribuye  perfectamente en su interior, mientras que en el huevo crudo la clara y la yema se desplazan de un lado para el otro de manera irregular haciendo que el alimento se tambalee al girar.

Este es el truco que no falla para distinguir un huevo duro o cocido de un huevo crudo y que puedes poner en práctica fácilmente al momento de  cocinar

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Imagen | Mustafa Bashari

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