Con el objetivo de deshacernos de los kilos de más, son muchas las alternativas que se encuentran a nuestra disposición. Por eso, te contamos qué son las dietas shock y cómo afectan el organismo.
Qué es una dieta de shock
Una dieta de shock o dieta shock, no es más que una alternativa que como su nombre lo indica, produce un gran impacto en nuestro cuerpo y especialmente, sobre nuestro metabolismo.
No hay una única dieta shock a nuestra disposición, sino que encontramos muchas alternativas que pueden englobarse bajo este nombre, ya que se trata de propuestas estrictas, habitualmente con muy bajo contenido calórico, y que prometen una rápida pérdida de peso.
Una gran mayoría de las dietas shock son basadas en líquidos, en batidos o preparaciones con alto contenido acuoso, representando las dietas detox un ejemplo de ellas.
El efecto de las dietas shock sobre la salud
Como hemos dicho, la dieta shock pueden impactar considerablemente sobre la actividad metabólica y la salud de nuestro cuerpo, especialmente porque suelen implicar un gran cambio en la alimentación cotidiana.
De esta forma, nuestro cuerpo puede verse amenazado por un bajo aporte calórico o por una alimentación extremadamente restrictiva en cuanto a variedad y cantidad, lo cual no sólo puede tener efectos a nivel físico sino también a nivel mental y emocional.
El efecto rebote suele ser habitual con estas dietas shock para bajar de peso, ya que pueden ralentizar el metabolismo y al mismo tiempo, alterar nuestra conducta alimentaria generando ansiedad, estrés y hambre que se acumula en el tiempo.
Por otro lado, podemos sentirnos irritados, fatigados e incluso experimentar deshidratación si llevamos una dieta shock o en casos graves, producir un desequilibrio de líquidos y electrolitos en nuestro cuerpo que pongan en grave riesgo la salud.
Las dietas shock no son más que alternativas muy estrictas que no modifican hábitos ni nos enseñan a comer o a mejorar nuestro comportamiento alimentario.
Por el contrario, pueden afectar considerablemente la salud del organismo representando propuestas temporales, rápidas, despersonalizadas y que habitualmente conllevan riesgos de carencias nutricionales y otras.
Por todo esto, las dietas shock no son recomendables si buscamos deshacernos de los kilos de más, pues aunque el camino resulte más lento y requiera de más esfuerzo, lo mejor es acudir alternativas personalizadas y guiadas por un profesional de la salud que nos ayude efectivamente a modificar hábitos y alcanzar un peso sano para siempre.
En Vitónica | El único truco que funciona para perder peso: el cambio de hábitos
Imagen | Foto de portada: Jumpstory y foto 1: Lisa Fotios.
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