Las preparaciones vegetales que simulan a las animales, como las hamburguesas, son cada vez más demandadas por la población que escoge un patrón dietético vegetariano o vegano. A la hora de cocinar estos productos debemos tener el mismo cuidado con los productos cárnicos, ya que someterlos a altas temperaturas genera compuestos tóxicos como la acrilamida, que se da cuando tostamos esa carne, tanto animal como vegetal.
Las hamburguesas vegetales también producen acrilamida
Los análogos de la carne de origen vegetal, en particular las hamburguesas, han ganado popularidad en la última década y pueden representar una alternativa a la carne que puede ayudar a satisfacer la demanda futura de proteínas de la población.
El sabor y el gusto son factores importantes para la aceptación de las alternativas a la carne por parte del consumidor. El sabor similar a la carne en los sustitutos de origen vegetal a menudo se crea durante procesos de cocción a alta temperatura, como freír, hornear o asar.
En esas cocciones se pueden formar compuestos no deseados, como la acrilamida genotóxica. Puede que hayas escuchado en alguna ocasión este compuesto denominado acrilamida que se forma especialmente en parrilladas, cuando se somete al alimento a altas temperaturas.
Las hamburguesas vegetales no se salvan de la formación de estos compuestos en el cocinado, por lo que, al igual que la carne animal, debe tenerse cuidado con superar los 120º C en las parrilladas y otros métodos similares en los que el fuego no nos permite regular la temperatura, y pueden alcanzarse valores muy similares a dichos 120º.
Las frituras y preparaciones en sartenes a muy altas temperaturas también generan acrilamida, tanto en hamburguesa animales como vegetales. Así lo revela un nuevo estudio en el que se observaron concentraciones de acrilamida superiores en hamburguesas vegetales y animales al someterlas a cocinados a altas temperaturas.
Mensaje para llevar a casa
El cocinado a altas temperaturas, por encima de 120º C, aumenta el riesgo de creación de compuestos tóxicos como la acrilamida. Este tipo de compuestos se disparan en preparaciones como carne a la parrilla, ya que con el fuego alcanzamos temperaturas muy elevadas, a lo que hay que añadir el humo procedente de la quema de carbón o madera.
Las hamburguesas vegetales tienen un comportamiento muy similar a las animales, por lo que si buscamos una mejor salud, lo ideal es cocinar estos productos, y los demás a temperaturas controladas. Cuanto más tostada esté nuestra hamburguesa, más acrilamida puede generar. Mucho más aún si se nos ha pasado y tiene ese color negro oscuro, por lo que hay que vigilar también el dorado de las hamburguesas vegetales, no solamente de las hamburguesas animales.
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Imágenes | LikeMeat (Unsplash), DLKR (Unsplash), Sigmund (Unsplash)
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