Si buscas una alternativa al agua, que te incentive a beber y que verdaderamente te alimente, revelamos cómo se prepara el agua de chía con limón, una bebida saciante y colmada de buenos nutrientes.
Receta de agua de chía con limón
Para darle sabor y sumar nutrientes al agua de toda la vida, podemos utilizar semillas de chía que brindan grasas insaturadas beneficiosas para el organismo fibra y proteínas vegetales que sacian con facilidad.
Mientras que, si añadimos limón (o lima en su defecto), podemos estar incorporando vitamina C, además de potasio y magnesio a nuestra bebida, contribuyendo así a la hidratación del organismo.
Para elaborar el agua de chía con limón solo necesitamos unos 250 ml (un vaso grande) de agua, un limón, cubos de hielo y si deseamos, una cucharada de miel o de algún otro endulzante.
Para prepararla mezclamos trozos de limón o trituramos esta fruta previamente lavada junto al agua en una batidora y después colamos para retirar los restos de la fruta. Posteriormente, mezclamos estos ingredientes con las semillas de chía, removemos y dejamos reposar unos 15 minutos para que la fibra de la chía absorba agua y espese la bebida.
Añadimos hielo y podemos incorporar también jengibre rallado o menta fresca si deseamos saborizar aún más e incorporar sustancias con efecto antioxidante y antiinflamatorio en nuestro cuerpo.
No sólo obtendremos buenos nutrientes, sino que beber el agua de chía nos saciará con facilidad, ya que la fibra de la chía que ha espesado la bebida también puede formar un gel absorbiendo agua dentro de nuestro organismo y de esta forma, calmar fácilmente el apetito.
Se trata de una alternativa a la limonada tradicional, con menos azúcares y mayor poder saciante, que podemos preparar durante el verano para hidratarnos y refrescarnos con buenos nutrientes.
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