La cafeína es un compuesto natural bioactivo que existe en el café, el té y muchos otros productos alimenticios. La cafeína provoca una variedad de funciones biológicas como la activación del sistema nervioso, la relajación del músculo liso, disminución del estrés antioxidante, mejora del metabolismo de los lípidos, etc.
Estudios recientes sugieren un papel protector de la cafeína contra el estrés oxidativo y la senescencia, que es es un mecanismo importante que protege a las células del estrés. Sin embargo, la senescencia también contribuye a patologías relacionadas con la edad en diversos tejidos, especialmente en la piel.
Piel y estrés oxidativo
La senescencia celular se ha relacionado con el proceso de envejecimiento de numerosos tejidos de mamíferos, especialmente la piel. Los estudios revelan que el estrés oxidativo derivado del sedentarismo, comida ultraprocesada y un mal descanso nocturno, es un factor clave para el envejecimiento de la piel, ya que deteriora la función mitocondrial, lo que a su vez promueve la generación excesiva de unas moléculas llamadas especies reactivas de oxígeno (que también pueden producirse durante el entrenamiento pero en menores cantidades) que aceleran el proceso de senescencia.
Con esto no queremos decir que el ejercicio físico provoque un envejecimiento de la piel. Justamente lo contrario; pero un estrés crónico derivado del los tres factores comentados anteriormente sí tiene un efecto perjudicial en la piel.
Cómo afecta la cafeína en la piel
Lo que se ha observado es que la cafeína, además de tener efectos activadores en el sistema nervioso central, también tiene un efecto antioxidante.
Esta es una de las razones por las que no se recomienda consumir cafeína después del entrenamiento, ya puede reducir los efectos oxidantes positivos del entrenamiento.
Según este estudio, la cafeína tiene un efecto antioxidante y reduce la senescencia celular y, junto a unos buenos hábitos de vida, tomar café puede tener efectos positivos sobre la piel.
Es obvio que si tenemos unos malos hábitos de vida, nuestra piel envejecerá más rápido y, por supuesto, consumir café (cafeína) no podrá combatir tantos niveles oxidativos.
Por tanto, si te preocupa la salud de tu piel, lo mejor es:
- Alimentación basada en alimentos vegetales
- Realizar ejercicio de fuerza y aeróbico como natación, ciclismo, etc.
- Buen descanso nocturno
- Tomar café que, además de tener buenos efectos sobre la piel, también tiene otros efectos positivos como ser protector contra enfermedades neurodegenerativas, enfermedades cardiovasculares, etc.
¿Funcionan los productos con cafeína para aplicarlos sobre la piel?
A día de hoy se sacan multitud de productos que pueden ayudarnos a cuidar la piel y, entre los ingredientes, está la cafeína. Pero ¿realmente son útiles para el cuidado de nuestra piel?
Parece ser que estos productos sí podrían tener un gran efecto positivo sobre esta por distintos efectos:
- Al ser un antioxidante, retrasa la aparición de arrugas y otras marcas relacionadas con la edad
- Al ser un vasoconstrictor, reduce el riego sanguíneo hacia la piel haciendo que se vea más suave
- Tiene un efecto antiinflamatorio y reduce el enrojecimiento de la piel
- Disminuye temporalmente la apariencia de tener estrías y celulitis alrededor de los ojos
Por tanto, el uso de productos con cafeína podría tener efectos beneficiosos sobre nuestra piel, por lo que, además de ingerirla, también podemos utilizar esta alternativa si no nos gusta el café.
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